Chocame que me gusta…

Hace algunos meses estoy llevando a cabo una investigación muy interesante, y que la verdad me dejó algunas dudas acerca del accionar de la justicia.

Exactamente por semana hay, solamente en la city cordobesa, cerca de 40 choques automovilísticos. Entre ellos, casi un 70% son pequeños roces o choques de minima gravedad.

Está bien, hasta aquí son solamente números que sirven para que algunos diarios del medio local tengan unas hermosas estadísticas, y como muchas cosas que en ciertos lugares de enseñanza se aprenden, sirvan para encaminar y crear conciencias criticas. Pero esto no es así.

Viendo un poco más allá del vaso vacío, de ese total de choques, casi el 85% de los casos tienen como protagonistas a una motocicleta, y el restante corresponde a choques mínimos entre autos o roces a peatones. Es decir que de cada 28 mínimos accidentes, casi 24 corresponden a motos…

En los últimos meses la actividad de las Empresas Aseguradoras se ha visto colapsada por la cantidad de siniestros provenientes de choques con motos. De un promedio anual de 280 casos, solamente en Córdoba, esta cifra se ha visto triplicada… SOLAMENTE EN LA PRIMERA MITAD DEL 2009…

Hablando con fuentes en una de las empresas más importantes de seguros, me afirma que la mayoría de los casos son denuncias con lesiones mínimas, pero los montos de dichos juicios oscilan entre los 150 y los 200 mil pesos, en conceptos de “daños materiales y psicológicos”, entre los más renombrados entre los pasillos de Tribunales.

Investigando, investigando, y mientras me tomaba un rico capuchino en la esquina del Hospital de Urgencias, fui testigo fehaciente de una de las principales causas de este aumento de casos: en pleno arribo de una ambulancia, proveniente de un choque en Bº General Paz, un abogado muy bien lookeado y con una labia que me hacía acordar a mis mejores épocas, convencía en plena camilla a la señora que se encontraba herida de demandar al otro conductor, en plena consciencia de la inconsciencia de la motociclista en cruzar en rojo… y, como luego me enteraría, esta señora cobraría una hermosa remuneración.

Este tipo de modalidad se ha increcentado en los últimos dos años, y se da principalmente al radio que comprende Nueva Córdoba y la zona periférica del Centro cordobés.

Y esto es solamente un caso de los miles que hay, pero que sirve para ilustrar uno de los nuevos trabajos del siglo XXI, mucho mejor remunerado, y por supuesto siguiendo la lógica del menor esfuerzo. Y claro, si es más fácil tirarse delante de un auto que trabajar 8 horas…